Cómo circular por la ciudad en bici sin riesgo de multas

Conviene desterrar para siempre la idea de que 

circular por las aceras es seguro y conveniente.

publicado en vive.telefonica.com

Moverse en bici por la ciudad es bastante sencillo. Basta seguir unas normas mínimas de circulación, apelar al sentido común y a la prudencia y conocer algunas señales para indicar los giros a derecha e izquierda. Sin embargo, a más de uno nos han surgido dudas alguna vez. ¿Qué pasa si me salto un semáforo en rojo? ¿Tendré la misma multa que un coche? ¿Me pueden hacer controles de alcoholemia?

Al contrario que para conducir un coche, a nadie se le exige que apruebe un examen teórico de circulación para montar en bicicleta. Y sin embargo hay algunas reglas que deben ser respetadas si no queremos encontrarnos con multas en ocasiones muy elevadas.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que la bici se rige por el Reglamento General de la Circulación como si de un coche se tratase. Por lo tanto, saltarse un semáforo supone una sanción de 200 euros, y no detenerse en un stop una de 120. Y por supuesto, nada de alcohol. Las sanciones pueden llegar hasta 500 euros en función de la tasa de alcoholemia, y negarse a realizar la prueba está penado con 400 euros.

Pero… ¿cuáles son las sanciones propiamente diseñadas para los ciclistas? Si asumimos que la bicicleta es un medio de transporte como cualquier otro y actuamos cómo tal podremos evitar gran parte de las multas, pero conviene conocer cuáles son las infracciones más comunes.

Por ejemplo, no llevar elementos reflectantes y señalización luminosa entre la puesta del sol y el amanecer se castiga con 60 euros de multa, lo mismo que circular por las aceras. Pero ojo con este segundo punto, ya que poner en riesgo la seguridad de los peatones sale muy caro. Además de la multa, las indemnizaciones por vía judicial pueden superar los 10.000 euros de sanción. Conviene desterrar para siempre la idea de que circular por las aceras es seguro y conveniente.

Pedalear a contramano, es decir en dirección contraria en una calle de sentido único, constituye no sólo un riesgo, sino también una sanción administrativa de 150 euros. Da igual que la calle sea pequeña o poco transitada, si te ve la policía te puedes meter un lío como le ocurrió recientemente al actor Alec Baldwin en las calles de Nueva York.

Todas estas infracciones están recogidas en la Ordenanza de Movilidad, que sin embargo, sí habilita a dos ciclistas a circular en paralelo. Eso es algo que mucha gente desconoce y que incluso desde el coche se tiende a criticar. Pues bien, pedalear en paralelo está permitido siempre que no se entorpezca la circulación y no se haga dentro de un carril bus.

Por último, escuchar música con auriculares, una costumbre que se debería erradicar por completo del universo ciclista, está penado con 91 euros. Y si eres menor de 16 años, el casco es obligatorio en todas las vías urbanas.

Ahora bien, todas estas sanciones son muy fáciles de evitar y además redundan en nuestra seguridad. Dejar libres las aceras, no escuchar música y no circular en contradirección no es algo tan raro, es lo que habitualmente hacen todos los ciclistas urbanos. Y es que para circular en bicicleta sólo hace falta un poco de civismo y sentido común. Siguiendo estos consejos, sólo es posible una opción: disfrutar a tope del ciclismo